
La mujer triste se mira al espejo y se repite una y otra vez
que los surcos que hay bajo sus ojos son meras sombras de una noche de
insomnio. Desea volar en la noche y ser acogida en las estrellas. Intenta
engañarse a si misma de que es poquita cosa,
pero el espejo la ve más bella que nunca. Mira al cielo, moja el pincel
en una lágrima y escribe en su rostro: Tal vez exista un mañana.
2 comentarios:
Me alegra que te guste. Ya sabes que tu formas parte de mi inspiración.
Encarna
Nice post.Keep sharing. Thanks for sharing.
Publicar un comentario